El pasado miércoles 19 de agosto se cumplieron 55 años de una de las más grandes hazañas de la ciencia, cuando las perritas Belka y Strelka se convirtieron en los primeros animales en volver vivas al planeta luego de estar en órbita en el espacio.
Años ’60. En plena Guerra Fría, la Unión Soviética y Estados Unidos competían en una carrera por conquistar el espacio. Y uno de esos pasos que tenían que hacer para lograrlo era enviar un ser vivo al espacio y que volviera vivo.
En esa época los científicos dudaban que el ser humano podría sobrevivir a las condiciones del espacio exterior. Por eso, decidieron enviar animales, como modo de prueba.
Todos conocemos el caso de Laika, la perrita que viajó al espacio el 3 de noviembre de 1957, quien lamentablemente murió arriba del Sputnik 2. A partir de ahí las pruebas con animales siguieron, pero con éxito. El caso de Laika demostró que un ser vivo podría sobrevivir a la puesta en órbita y la microgravedad. Los científicos tuvieron que sumar las reacciones del cuerpo al someterse a tales condiciones.
El 19 de agosto de 1960, dos perritas callejeras quiltras, Belka y Strelka, junto a 42 ratones, dos ratas, un conejo y varias especies de hongos y plantas, lograron orbitar por 26 horas la Tierra, logrando llegar sanos y salvos al planeta.
Por un momento, se temió que estos “cosmonautas de cuatro patas” sufrirían el mismo camino que tuvo Laika, debido a que por la ingravitez, los animales estuvieron inmóviles por un momento. Pero, pasado unos minutos , comenzaron a moverse y ladrar.
Luego de la travesía.
A su regreso al planeta, las perritas se habían convertido en unas celebridades.
Strelka tuvo una camada con otro de los perritos del entrenamiento al espacio, de la cual nacieron 6 perritos. Una de ellas, Pushinka, fue enviada como regalo a una de las hijas de John F. Kennedy.
¿Conocías la historia de Belka y Strelka?